Consecuentes con ello le informamos con cariño y empatía de que es una intervención sencilla y breve en las primeras semanas de embarazo como ocurre en la mayoría de los abortos.
Nuestro equipo trabaja para que la mujer se sienta cómoda y perciba que queremos ayudarla y estamos de su parte. Además le prestamos una atención medica y de acogida de alta calidad y durante todo el proceso.
No es necesario que venga con la vejiga llena.
Podrás consultar con nuestros profesionales tus dudas y malestares ó si aparece algún síntoma atípico.
A los 15 días de la intervención es conveniente un control clínico, para valorar la correcta evolución y prescribir un método anticonceptivo.