En Ginegranada en el año 2014 interrumpieron el embarazo 84 mujeres de 16 y 17 años, en 12 casos abortaron sin informar a sus tutores. Representan un 0,63% del total de mujeres que interrumpieron el embarazo en nuestro centro durante el año pasado.
Maria tiene 17 años, acude a Ginegranada para abortar acompañada por su madre, hace un año que tiene novio y seis meses que tiene relaciones sexuales, se le rompió el preservativo y se lo dijo a su madre, tomo la píldora de urgencia, no le funcionó y se quedó embarazada, decidió interrumpirlo, pues esta estudiando y no se siente preparada para tener un hijo. Acudió a la clínica acompañada por su madre y su pareja.
Lucia también tiene 17 años y tiene novio desde hace 9 meses, tuvo relaciones sexuales y ese día hizo la marcha atrás pues no tenían preservativo, se quedó embarazada, se lo dijo a su novio y no quiso saber nada, ella no quiere continuar el embarazo, pero no se lo puede decir a su padre, con el que vive,( su madre se fue de casa hace dos años y ella cuida de un hermano enfermo) porque teme una reacción violenta por su parte y que la obligue a tener un hijo que ella no quiere. La trabajadora social de su centro de salud la atiende y le realiza los informes preceptivos y la envía a Ginegranada.
De aprobarse la reforma legislativa propuesta por el PP, que obliga a todas las mujeres de 16 y 17 años sin excepción a informar a sus padres y que estos decidan por ellas si interrumpen su gestación, protegerá a mujeres como María que ha podido comunicar a su madre su situación y que ya está protegida y abandonará a su suerte a Lucia, poniendo en riesgo su integridad física y abocandola a un aborto clandestino.
Vanesa Jimenez Agudo
Educadora social.
Clinica Ginegranada